«Venite ad me omnes qui stomacho laboratoratis et ego restaurabo vos»
Una modestísima caupona o un pandokeion, a cargo de una stabularia que desea para sus huéspedes, buen alimento y sobre todo alegres disquisiciones.
Se inicia con un poco de miedo ¿sabremos hacerlo?¡Hay tantas maravillas sobre la tierra!
Pero Baetulo fue la responsable, ella nos sorprendió y entendimos que nuestra sorpresa podía ser transmitida a los demás.
Vale, Baetulo! A través de ti, iremos haciendo camino, como los peregrinos, de la montaña al mar, parándonos aquí o acullá para saborear durante
el trayecto nuestro buen vino y nuestro buen pan reconociendo en cada descubrimiento que "estamos en casa".
No hay comentarios:
Publicar un comentario